jueves, 20 de junio de 2013

u________________________________________s

Me hace gracia. Gracia de esas de las mías; una media sonrisa con el café. De las que vienen con un mínimo toque de esencia. Agua de..., no. Eau, que el producto nacional no está al alza. ¿De qué, otra vez? Quizá de irse por las ramas.


(let ring) (and reign)

No, esencia de mí. Oh, por favor, vete un congreso de veganos. Exhalar como forma de expresión. El arte de reírse de uno mismo, de la situación y del quéhehechoyoparamereceresto. De desesperación, al fin y al cabo. Si es que me lo busco. Creo. Bueno, igual ahora no. Quién sabe, igual me acabo de volver gallego.

"Nah, ponme unas Google Glass para el chaval, a ver si así, con la cosa del luminoso, se empana." 

Dice Muse que your freedom comes naturally. Bendito libre albedrío. Oda al anhelo de Segismundo (me hace gracia también esto). Está genial eso de ponerse a estudiar fisiología. Las metáforas te salen como churros. Que si cómo interacciones con lo que te rodea (...la viscosidad) depende de la resistencia, y afecta a la presión. Por favor, que alguien llame a algún poeta frustrado con poca paciencia y una vocación de picador a la vieja usanza, hemos encontrado un filón!

Bueno, ya. Que si das tanto pie a tu follonero particular, no acabamos nunca (¿Casualidad?).

Murphy no estaba loco, era un tío realista. Y sí, eso lo pienso hoy, y mañana digo que pseudociencia pa' arriba y pa' abajo. Pero al final, el que duerme más pegado a uno no es otro que sí mismo. El que insinúa ideas geniales, chorradas inmensas y es némesis e ídolo a la vez, no deja de estar en nosotros mismos. Qué fácil podría ser rendir cuentas, con tan pocos a los que consultar.

Pero no nos vale. ¿Por qué? En mi caso me gusta pensar que solo puede ser porque me aburriría bien pronto de mí mismo. Ah, y porque culo veo, culo quiero. O peor, culo veo, culo no alcanzo. Madre mía, qué feo ha sonado eso. Obsceno, innecesario, basto, fácil, perro, amedrentada, caminar.

Es curioso, porque de 6.000.0000.000 personas, ninguna se ha revelado, con pruebas, como capaz de leer en el otro sin preguntar. Menos mal que algún homo gilipollensis por ahí perdido profirió un sonido una vez. Dándole al fast forward, llegamos a hoy.
Vemos un hombre, una mujer, otro hombre, otra mujer. Viscosos. Sin perrerías, ni andares, ni cobardes sueltos. Y cada cual busca algo. They all are dressed for success. Hablan, todos cuentan sus chistes. Son malos, muy malos. Hay una genialidad, pero queda empañada por la atmósfera. O no, alguno de los días, se abre un claro. Entonces hay un evento genial, singular, feliz. Aparece, entonces sí, una sonrisa. Una entera, que no exhala más que lo que es, un signo de un sentimiento puro. Y a nadie le hace gracia. But success it never comes.
La cuestión que me surge, o al menos, que debería, es... ¿hasta qué punto escribe cada uno su guión? Nazco, crezco, me reproduzco y muero. Pago la hipoteca un par de años después de morir, eso sí. Pero casualmente, esa no es mi vida. Mi vida eres tú que lo lees, tú que querrías que yo leyera lo tuyo y aquella de allí que me gustaría que lo leyera. Y en el medio, las sonrisas que vienen inesperadamente y las que se quedan a medias.



P.D.: Cada día te superas... ¿qué va a ser lo siguiente? ¿Un lienzo pintado con tus lágrimas y carboncillo? Mejor no te doy ideas, que igual te montas algún otro proyecto... 

No hay comentarios:

Publicar un comentario